Partiendo de los principios de prevención y
precaución de la Gestión del Riesgo, que contempla acciones preventivas,
correctivas y reductivas para el abordaje adecuado de la pandemia, el Centro
Hospitalario Transitorio, ubicado en el recinto ferial de Corferias, fue una medida con
la cual la ciudad se preparó de manera rápida, como lo exigía la llegada inminente
del COVID-19 al país.
El objetivo era que este centro hospitalario sirviera de respaldo a la reconversión de
camas hospitalarias que han venido realizando las Instituciones Prestadoras de
Salud de la ciudad, con el fin de aumentar las camas de cuidados intensivos para
atender los pacientes críticos de la enfermedad y albergar pacientes con mayor
riesgo de padecer la enfermedad, es decir con hipertensión, obesidad, diabetes u
otras patologías crónicas que los ponían en riesgo dentro de las clínicas y hospitales
que los atendían.
Los factores que se tuvieron en cuenta para instalar el centro hospitalario transitorio
en Corferias fueron: la posibilidad del montaje de áreas de expansión para servicio
hospitalario de baja y mediana complejidad en un tiempo mínimo, la disponibilidad
del área acorde a criterios y estándares de habilitación de servicios, la disponibilidad
inmediata de servicios públicos, la facilidad de adaptación del área de expansión,
un operador logístico que no incluyera el pago de arriendo por las superficies
ofrecidas y la posibilidad de atención en el contexto de ciudad región.
Todo esto con el fin de responder a situaciones críticas como el desbordamiento de
la ocupación del sistema de salud de la ciudad y sus efectos sobre la vida de los
ciudadanos.
Por eso, la ocupación del centro transitorio, que nunca llegó al 100%,
refleja la pertinencia de las medidas tomadas por la administración distrital, las
cuales permitieron que la ciudad superara este primer pico de la pandemia.
El Centro Transitorio operará hasta el próximo 30 de septiembre. Durante estos
meses de operación fueron autorizadas 274 camas para su funcionamiento, lo que
permitió la atención de 455 pacientes de las cuatro subredes de servicios de salud,
así como de cinco EPS.
El conjunto de medidas tomadas por la Administración Distrital para enfrentar la
pandemia, como la suspensión de servicios de salud no urgentes, el modelo de
atención médica domiciliaria, el aislamiento, y la presencia del Distrito en los
territorios para cuidar a la ciudadanía, evitaron que la ocupación hospitalaria de la
ciudad rebasara sus límites y permitió que todos los ciudadanos que lo han
requerido, hayan recibido atención de manera oportuna.
En cuanto a la inversión, aunque la Secretaría Distrital de Salud apropió 200 mil
millones de pesos para el montaje, adecuación y funcionamiento de este proyecto,
gracias a una planeación juiciosa y rigurosa de ese presupuesto, hasta la fecha sólo
se han ejecutado $14.926 millones de pesos y al cierre de este centro hospitalario,
únicamente se habrán gastado $18.000 millones, debido a que el convenio suscrito
entre la Secretaría de Salud y la Subred Centro Oriente estipula que los giros se
realizarían según la demanda.
El resto de los recursos proyectados se destinarán a
investigación en Covid-19, así como al fortalecimiento de la estrategia de
aislamiento y rastreo y de salud mental.
Es importante señalar que el Distrito no pagó arrendamiento por el espacio ferial.
Para el montaje y adecuación del hospital, la inversión fue de 5.000 millones de
pesos y el excedente corresponde a la operación, el mantenimiento y pago de los
servicios públicos de este hospital, la contratación de personal de la salud, la
compra de insumos como equipos biomédicos, alimentación y medicamentos y la
operación de las camas autorizadas.
Respecto del mobiliario adquirido para la adecuación de este centro hospitalario
transitorio, la Secretaría de Salud de Bogotá coordinará la reubicación del mismo
para programas sociales del Distrito que benefician a la ciudadanía.
Haga clic aquí para escuchar a Alejandro Gómez, secretario Distrital de Salud.