Tómatelo con calma
El alcohol es la sustancia psicoactiva más utilizada en el mundo. El consumo nocivo de alcohol es uno de los principales factores de riesgo evitables de trastornos neuropsiquiátricos y de enfermedades no transmisibles e infecciosas.
Los peligros del consumo de alcohol son muchos y variados, al ser una sustancia tóxica que tiene efectos directos e indirectos sobre el organismo. Según la OMS entre los problemas causados por su consumo están: intoxicación aguda, envenenamiento por alcohol, pancreatitis aguda, arritmias cardiacas agudas, insuficiencia hepática (en un consumidor crónico con deterioro hepático), enfermedad crónica por la exposición a altas dosis de alcohol a largo plazo, daños al feto en mujeres embarazadas, violencia familiar, problemas económicos, riñas, lesiones, accidentes automovilísticos.
El abuso del consumo de alcohol ocupa el tercer lugar entre los factores de riesgo de muerte prematura y discapacidad. En Bogotá, los jóvenes entre 18 y 24 años presentan una tasa de más de 50% en el consumo de alcohol. Al menos 89% de los habitantes de la ciudad ha consumido licor alguna vez en su vida, y de estos el 37.9% tiene rasgos de uso abusivo o dependencia del alcohol.
Por lo anterior, la promoción de hábitos de vida saludables supone un consumo responsable de alcohol que implica, además de ser consciente del consumo de bebidas alcohólicas, tener presente consejos como: comer antes y durante el consumo, tomar agua al mismo tiempo, no mezclar bebidas alcohólicas, consumir en sitios seguros y con amigos y evitar conflictos.