Según el Estudio de Consumo de Sustancias Psicoactivas en Bogotá, al menos 943.000 personas son fumadores activos que -además de estar en riesgo por los efectos tóxicos del cigarrillo que provoca cada año más de siete millones de muertes en el mundo- son generadores de contaminantes por la mala disposición de las colillas y la producción de humo de tabaco que afecta a quienes están en su entorno.
El cigarrillo contiene más de 6.000 sustancias químicas tóxicas que afectan la salud (su consumo es uno de los principales factores de riesgo de varias enfermedades crónicas como el cáncer y las enfermedades pulmonares y cardiovasculares) y contaminan el agua, el ambiente y los alimentos con metales pesados como el cadmio o el arsénico; además el humo del tabaco contiene más de 60 compuestos cancerígenos que ponen en riesgo la vida de los fumadores y los no fumadores (estos últimos por su exposición pasiva al mismo).
Autoridades sanitarias como el Ministerio de Salud y Protección Social en Colombia, advierten a las personas que al fumar tienen mayor riesgo de infección por Covid-19, debido a que el humo de tabaco deteriora los mecanismos de defensa del aparato respiratorio y produce inflamación. En ese sentido, los fumadores tendrían mayor riesgo de complicaciones por el Covid-19, lo que se suma a los riesgos ya conocidos por el consumo de tabaco.